LA BALSA DE LA MEDUSA

PRÓLOGO

Día 2 de julio de 1816:
El navío “Le Méduse”, que se dirigía a la colonia de St. Louis en Senegal, queda varado en un banco de arena a 50 millas (unos 160 kilómetros) de tierra firme. Los botes no eran suficientes para toda la gente que viajaba en el barco…así que construyen una balsa. En un principio la idea era remolcar a la balsa con los botes salvavidas, pero ante la presión de las autoridades civiles y la aristocracia (que ya habían asegurado su puesto en las barcas) el capitán corta los cabos del remolque y abandonan a su suerte…a la deriva sobre unos trozos de madera…a 149 personas!!!!!...149 personas en medio del mar…sin comida, sin bebida, sin abrigo…

Dos semanas después…:
Un barco francés avista la balsa. De 150 personas tan solo quedaban 15…Unas tablas medio deshechas, unas personas medio desnudas, deshidratadas, hambrientas, la piel quemada por el intenso sol y el salitre del mar, llagadas, mugrientas, exhaustas, rodeadas de los últimos cadáveres, de suciedad, de excrementos, de miseria…Habían tenido que sobrevivir durante 15 días bebiendo sus propios orines, la sangre y alimentándose de la carne de los que iban pereciendo a lo largo de esos 15 eternos días…No les había quedado otra opción…tuvieron que canibalizar a sus compañeros de desdichas para poder seguir adelante…

Los supervivientes del naufragio acusaron de abandono al capitán y a la alta alcurnia que habían huido dejándoles desprotegidos…Un juicio militar condenó al capitán por negligencia y abandono de la tripulación…

Esto podría ser un tremendo relato de terror…ES UN RELATO DE TERROR. El tema está en que no es ficción!!!!...Si no que es una verdad HISTÓRICA…Plasmada por T. Géricault en “LA BALSA DE LA MEDUSA”…

EL CUADRO:

Como ya sabéis, el “romanticismo” es una “filosofía” que me apasiona y que hago mía. Géricault plasma en esta obra el tremendo dramatismo de la circunstancia que estaban viviendo los protagonistas…

Básicamente, la composición es una X…Dos aspas cruzadas…

De la parte inferior izquierda a la superior derecha:
Se pueden ver distintos estados de ánimo…Un personaje nos “golpea” visualmente con sus ropajes rojos. Es el único que mira en la dirección opuesta al resto…resignado, pensativo, desilusionado. Entre sus brazos…su hijo muerto, rodeado de cadáveres. Si vamos ascendiendo por esa diagonal, vemos a los personajes que van levantando hasta llegar al opuesto al descrito antes…En su mano un paño, también de color rojo, llamando la atención, LLAMÁNDONOS la atención. Intenta avisar a un supuesto barco que está a lo lejos!!!!...Reune sus últimas fuerzas!!! En el todavía persiste el ánimo de sobrevivir!!!!...Porque considera que aún hay alguna oportunidad…Pese a las gigantescas olas, pese al cansancio…

La otra diagonal va de la parte inferior derecha a la superior izquierda…En este sentido vemos un cuerpo parcialmente fuera de los maderos.. El artista incluso recogió cuerpos en un hospital para usarlos como modelo y así hacer la composición más realista. En la parte opuesta, la vela nos muestra una cruda realidad, y es que nos muestra que el viento sopla hacia la dirección opuesta a la que está el buque que podría salvarlos!!!!...Es símbolo de desesperanza, del azar del destino…La vela, el viento en contra, las grandes olas que se ven al fondo y un cielo encapotado…que anuncia la proximidad de la tormenta…


CONCLUSIÓN:

Un hecho real, pero una “metáfora” de la vida…Y porque no!!!...de los tiempos que corren…El naufragio es de TODOS…Nos hudimos. Pero los pudientes tienen sus “botes” salvavidas…llegarán a tierra!!!...No pienso “comerme” a mis compañeros, pero estoy seguro de que el viento…al final soplará a favor. Hasta que no tenga más fuerzas…hasta que me desgañite de gritar…